“Entiendo que este es el momento preciso para
que todos nos unamos, como sociedad, y logremos erradicar semejante lastre,
porque el matrimonio infantil es una violación legalizada”, alertó el
comunicador.
Una práctica que, a juicio
de Dotel, tiene cifras alarmantes en nuestro país, las cuales deberían
preocupar a todos los tomadores de decisión. “Según revela UNICEF, la República
Dominicana cuenta con las cifras más elevadas de matrimonio infantil y uniones tempranas
(MIUT) en la región de Latinoamérica y el Caribe. Por igual, según la encuesta
ENHOGAR-MICS 2014, el 35.9 % de las mujeres jóvenes (entre 20 y 24 años) se
casó o unió antes de los 18 años y el 12.3 % lo hizo antes de los 15 años.
Ambas cifras se encuentran muy por encima de
la media regional de adolescentes menores de 18 años, casadas o unidas (23 %),
y más del doble de la media en adolescentes menores de 15 años (5 %)”, detalló.
El comunicador también
alertó que, según estos estudios de
campo, dicha realidad también califica
como esclavitud moderna, debido a que aborta todo el proyecto de vida de las
niñas y adolescentes. “El matrimonio infantil y las uniones tempranas limitan
todos los esfuerzos para combatir la pobreza, debido a que aumentan la
desigualdad en nuestra sociedad y transmiten esas condiciones a las
generaciones futuras. Por igual, afecta no sólo a las niñas, adolescentes y a
su familia inmediata, también reduce las posibilidades de progreso de toda la
sociedad dominicana”, advirtió.
En ese mismo tenor, el
comunicador también detalló que el matrimonio infantil produce en la niña “la separación de la
familia y los amigos, la falta de libertad para relacionarse con personas de su misma edad y una gran
reducción de las oportunidades de recibir educación, lo cual, evidentemente, le
impedirá desarrollar todo su potencial”, explicó.
De igual manera, debido a la
falta de información o de poder de decisión sobre su salud sexual y
reproductiva, “las niñas se enfrentan a graves riesgos para su salud, como son
los embarazos prematuros o las infecciones transmitidas sexualmente, lo cual
podría poner en peligro sus vidas”, advirtió Dotel.
No obstante, el
comunicador se siente esperanzado y
optimista, debido a que cada vez más, diferentes personas e instituciones alzan
su voz para protestar contra una práctica que ha sido legitimada por las leyes
y la cultura.
“Aplaudimos que el diputado
de Alianza País (AlPaís), José Horacio, presentara ante la Cámara de Diputados
un proyecto de ley, para modificar varios artículos del Código Civil, que
permiten el matrimonio infantil en la República Dominicana. Pero tal acción no
es suficiente, también se precisa realizar un desmonte cultural en nuestra
sociedad, para así evitar que gran parte de la población siga normalizando esta
grave violación a los derechos de nuestras niñas; y eso se logra con una
educación más inclusiva y respetuosa de los derechos de todas y todos”,
finalizó.
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